Autor Fernando Rodríguez Céspedes
Comunicador maeño residente en Santo Domingo
La megalomanía de ciertos políticos nuestros, los lleva con frecuencia a hacer el ridículo cuando
pretenden dar carácter de altas
políticas o asuntos de Estado a
engorrosas situaciones personales en las que se meten por “indelicados” y
prepotentes.
Hace poco, en medio de una polémica pública con la periodista
Nuria Piera, quien denunció que el
doctor Euclides Gutiérrez Félix, no honraba sus compromisos de pagar las
facturas eléctricas de una de sus mansiones, este pretendió hacer creer que
detrás de la denuncia, existían propósitos desestabilizadores contra el
Gobierno y el presidente del Partido de la Liberación Dominicana.
Ahora, quien se destapa con un argumento similar, alegando
una trama para hacerle daño y sacar de los medios informativos la manoseada
noticia de la cooperación económica del extraditable acusado de narcotráfico
Oscar Ezequiel Rodríguez, a favor del PLD,
es el ex senador Tonty Rutinel Domínguez, acusado de agresión física por
la señora Leidy Dayanara Caraballo.
Con anterioridad se había defendido de la acusación alegando que la señora padecía trastornos mentales, lo que en vez de una defensa contra la
acusación, representa un agravante y una falta de consideración y respeto
debido a que tiene un hijo pequeño con ella lo que motiva a pensar si para embarazarla
se aprovechó de su condición de “trastornada” o si resulta cierto que la
agredió, y eso lo determinarán los tribunales, lo hizo contra una persona víctima
de una discapacidad.
Sean cuales sean los resultados del juicio a que será sometido,
nadie le va a creer que altos
funcionarios palaciegos, un fiscal y hasta posiblemente el presidente de la República
se reunieron para urdir la trama y acusación que hoy pesa en su contra para
desviar la atención de un lamentable caso que afecta, por igual, a los dos
grandes partidos del país.
Mientras tanto, que busque otros argumentos de defensa más creíbles
y deje de lado el aire triunfal y amplias sonrisas que exhibió cuando se
dispuso su libertad provisional y fue
aclamado por los compañeros de partido que fueron a darle respaldo, porque la
sola acusación de golpear a la madre de un hijo, debe compungir a cualquiera, independientemente de que resulte falsa o
cierta la denuncia.
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