Santiago de Chile, (EFE).- El escritor peruano Mario Vargas Llosa instó hoy a los latinoamericanos que defienden la libertad a apoyar la "nueva transformación de Chile hacia el progreso" que, a su juicio, significará una victoria del candidato presidencial conservador Sebastián Piñera en las elecciones del día 17.
"En América Latina, Chile lidera la defensa de la fórmula de progreso, de la libertad política y económica, que está encarnada en la figura de Sebastián Piñera. Por eso estoy aquí y por eso deseo su victoria", recalcó Vargas Llosa en un acto electoral.
El escritor, que llegó este jueves a Santiago, opinó que "las elecciones que hay en Chile no se pueden dejar sólo en manos de los chilenos".
"Todos los latinoamericanos que queremos defender los espacios de libertad y de democracia tenemos que apoyar esa nueva transformación de Chile hacia el progreso", señaló el autor de "La fiesta del Chivo" durante un coloquio junto a Piñera.
El candidato de la derechista Coalición por el Cambio es, según los sondeos, el favorito para ganar la segunda vuelta de las presidenciales, en las que tendrá como rival al oficialista Eduardo Frei.
En el encuentro con Piñera, al que también asistieron los escritores Jorge Edwards, Roberto Ampuero y David Gallagher, el autor de "La ciudad y los perros" clasificó los países latinoamericanos entre defensores y enemigos de la democracia.
"La oposición fundamental en nuestros días no se da entre la izquierda y la derecha, sino entre la democracia y sus enemigos", sostuvo.
El escritor situó a Costa Rica, Panamá, Colombia, Perú, Chile, Uruguay, México y Brasil entre los defensores de la democracia, que a su juicio tiene sus enemigos en Venezuela, Cuba, Nicaragua, Bolivia y Ecuador, mientras Argentina constituye "un galimatías indescifrable".
"Para mí Argentina es un galimatías indescifrable, una tiniebla a la que no consigo comprender, (...) un país que, de desarrollado, se ha ido subdesarrollando en el fenómeno atroz del peronismo", afirmó.
De México elogió al gobernante Partido Acción Nacional (PAN), que "aunque ha cometido errores" administra un país "mucho más libre de lo que era bajo la dictadura discreta y manipuladora del PRI".
Vargas Llosa destaco, entre los enemigos de la democracia al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, del que dijo que confunde "socialismo, marxismo, autoritarismo, fascismo y caudillismo militar" para conformar, a su juicio, "una extraña olla podrida".
De Cuba dijo que "vive bajo una dictadura que ha convertido a la isla en una cárcel", en la que "todo el espíritu de resistencia parece volcado en el deseo de huir".
"Cuba ilusionó a muchos latinoamericanos de nuestra generación", afirmó Vargas Llosa, quien consideró que observar lo que ocurre después de 50 años "es realmente para llorar".
"Lo increíble es que ese modelo, si se puede llamar modelo a una catástrofe semejante, sea lo que hoy día proponen Hugo Chávez y los países a los que, con su retórica o sus 'petrodólares', ha conseguido reclutar", incidió.
Entre los reclutados citó al presidente nicaragüense Daniel Ortega, al boliviano Evo Morales y al ecuatoriano Rafael Correa.
Según Vargas Llosa, estos mandatarios "representan la confusión más absoluta, donde con una retórica socialista y marxista aparecen de pronto posiciones racistas, como son las de Evo Morales en Bolivia".
En este contexto, el escritor ensalzó a Chile como "un país ejemplar" y dijo que es el que más ha avanzado en América Latina en los últimos veinte años por el camino de la libertad política, económica, social y cultural".
"Chile ha dado pasos de gigante a partir de la caída de la dictadura de Pinochet (1973-1990), que fue catastrófica y una vergüenza como lo son todas las dictaduras, y yo mismo la combatí", afirmó Vargas Llosa.
Sin embargo, en las primeras elecciones democráticas tras la dictadura, Vargas Llosa respaldó en Chile a Hernán Büchi, ex ministro de Hacienda y delfín de Pinochet.
"La Concertación ha cumplido un trabajo histórico y admirable en estos veinte años, pero ha perdido dinamismo y energía", dijo en alusión a la coalición que dirige el país desde 1990.
Piñera alcanzó el 44,03% de los votos en la primera vuelta de las presidenciales, celebrada el 13 de diciembre, mientras que Frei, candidato de la Concertación, logró un 29,60% de los votos.
frf/ar
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