CON LOS CUARTOS AJENOS (y II)

Por: José Jordi Veras Rodríguez

Iniciaremos diciendo tal como finalizamos la semana pasada, estamos seguros de que el caso del Vicepresidente de la CDEEE, no es el único –y esto lo estableceremos con otro ejemplo- y no debe ser el peor.

Y a la vez sabemos que se envuelven intereses políticos y económicos en esta situación. Ahora bien, esto no significa que la periodista y su denuncia, en el caso de Nuria Piera, se esté prestando para ese juego, porque así como hoy lo hace con Radhamés Segura del PLD, lo hizo con Eligio Jáquez, cuando fue Secretario de Agricultura y su “inesperada riqueza” y muchos otros, eso está fuera de discusión.

Lo que no deja de ser cierto es que las pruebas del nepotismo y el favoritismo político y de provecho particular están ahí, que no las quiera ver ni les interese al DPCA (anterior DEPRECO) y al Procurador General de la República, lo cual, en ambas instituciones no sería el primer caso que así actúan.

Sin embargo no deja de ser escandaloso, con tintes de burla, bochorno y una vergüenza, cuando en dos meses consecutivos los que pagamos y esto lo decimos en mayúsculas “PAGAMOS”, nuestras facturas energéticas, hemos sufrido dos aumentos en la tarifa y hasta en el cargo fijo. En momentos que las grandes mayorías están pasando muchas calamidades y vicisitudes, frente a la irresponsabilidad de un gobierno derrochador, que en su burocracia continúa aumentando sus gastos de personal y en funciones cuyos beneficiarios o no realizan ninguna labor o ni siquiera viven en el país y cobran o se crean puestos que hacen ningún trabajo.

Esto hace que el encono sea mayor por lo creado desde la CDEEE, aún sabiendo que no todo es responsabilidad, en cuestión de tarifas de la comercialización y de la distribución, sino que las generadoras son las que marcan el precio inicial y abusivo. Es una maraña, donde el usuario y consumidor responsable que siempre paga, está en el medio de todo, sin ayuda ni protección ante el sector público y privado.

Si contra los que eran encargados del PRA y de la OTTT, fueron cancelados y solamente el primero, ha sido cuestionado por el DPCA, el ministerio público de la prevención de la corrupción, ¿de qué forman piensan ustedes que actuará el Presidente en contra del caso de la CDEEE? Les responderé sin ambages, de ninguna forma, porque al primer mandatario, sus hechos han demostrado que no le preocupa ni le importa la corrupción ni aquellos que hacen un a práctica de esto. Mucho menos van actuar los organismos de la Procuraduría en contra de miembros ligados y relacionados al partido del poder.

Lo normal fuera que todo funcionario, sin importar el cargo, ni su importancia capital, que hubiese actuado con menos de lo que hizo el de la CDEEE, hubiese tenido que renunciar solamente por vergüenza moral y de confianza, sin embargo, esto no se práctica en nuestro país sino es llevado de la mano de la presión mediática, a esto hemos llegado.

Lamentablemente el Vicepresidente de la CDEEE está y estaba consciente que alrededor del negocio eléctrico medran muchos intereses diversos y que su cabeza es muy apreciada en los mismos, lo menos que podía hacer era cuidar su imagen y confianza en el manejo de los recursos.

No solamente, como expresamos más arriba, tiene cuestionamiento el de la CDEEE, sino que en muchas de las instituciones del Estado, el fenómeno de la corrupción, unida a sus parientes, el clientelismo, el nepotismo y la politiquería, es una práctica que es propiciada desde arriba hasta abajo.

Uno de tantos ejemplos, es el caso del INDRHI, en esta dependencia no existe algo diferente a lo que hemos visto y analizado, en esta existen dirigentes reformistas conocidos que son funcionarios del gobierno y a su vez se les tienes asignado un puesto en dicha institución. Por la alianza con el Partido Reformista, el gobierno ha decidido, como si el país fuera su finca propia, otorga sueldos y puestos a gente que ha sido aliado en las últimas elecciones. Esto sin contar lo que refiere a la denuncia de Alicia Ortega relacionado con contratos de construcción millonarios.

Definitivamente debemos concluir que muchos de los están en el poder al ver la manera en que el primer mandatario maneja los recursos del poder y las instituciones, colocando aliados en puestos de Consulados y Embajadas que sobrepasan su nómina y función, cuando fue el primero que prometió en el año 2004 que esto no ocurriría y vemos como periodistas y comunicadores aliados a las actuales autoridades les pagan con puestos públicos ganando los cuartos de los otros, de todos, del pueblo.

Los que actúan de forma incorrecta como los casos que hemos mencionado, piensan o tienen la creencia de que lo que manejan pueden “regalarlo”, donarlo, utilizarlo y tomarlo en su provecho y el de los suyos y lo hacen convencidos de que no es nada pecaminoso su acción y de que además piensan que si “otros lo hace desde el poder y nada le hacen como sanciones lo pueden hacer también”.

Es por esto que el anterior incúmbete del PRA, declaró que lo habían cancelado tan sólo por tener unos “sobrinos”, al parecer desconociendo el mismo que “nepotismo” viene del latín “nepos” que es sobrino. El hecho de enriquecer a parientes ha universalizado el concepto.

No deseamos finalizar, sin antes evocar unas líneas de nuestra amiga, la responsable, honesta y decidida, Grisbel Medina, que en su sonajero del jueves 2 de julio, publicó lo siguiente: “A usted funcionario o “servidor” público: no es nada admirable fecundar su imagen. Por eso no me parece simpático que hay una foto del síndico en la entrada de ciertas obras ni encima de semáforos instalados con dinero público”.

“La fama de generoso ganada a fuerza de darlo que no es suyo no le hace candidato a la versión masculina de la Madre Teresa, la servidora de Calcuta”. “Es muy fácil donar lo ajeno y exprimir la “res-pública” para abonar posteriores reconocimientos”. “Ay chichí, es muy “cool” mojarle la mano a iglesias, fundaciones de legisladores e inflar bocinas a su favor a cambio del billetaje que sal del pueblo”.

Del fragmento del artículo de la aguerrida y bien instruida periodista santiaguera, podemos colegir que el fenómeno de la corrupción tiene muchos inscritos y aquellos para proteger ese fenómeno. El mismo está presente en la mayoría de las instituciones del Estado y con la calamidad de que con su amiga, la impunidad, crece cada día más en las mismas y sin la voluntad ni la intención de sancionar desde arriba.

Hoy los malos son periodistas y comunicadores como Nuria, Alicia otros más, por denunciar y mostrar el lado de la corrupción y no aquellos que la realizan y la propician, qué cosas eh.

e-mail:jordiveras@yahoo.com