La decisión de Twitter de tener la potestad de
censurar contenidos en ciertos países, después de haber sido estandarte
de la primavera árabe, ha decepcionado a sus usuarios y ha enfadado a
los "hacktivistas" de Anonymous, que llaman a boicotear mañana a la red
de "microblogging".
"Desde hoy, nos proveemos de la capacidad de
bloquear de forma retroactiva contenidos en un determinado país", así
anunciaba la compañía californiana que ha desarrollado un sistema de
censura para impedir que mensajes que puedan resultar inadecuados en
algunas culturas o estados puedan leerse en esos lugares cuando
"entidades autorizadas" así lo soliciten.
La decisión ha provocado multitud de reacciones en
el propio seno de la red social, donde el tema "@censúrameesta,
Twitter" era uno de los más comentados.
La sospecha de que la compañía, hasta ahora
acérrima defensora de la libertad de expresión en internet, se ha
plegado a los deseos censores de ciertos gobiernos con el objetivo de no
frenar su expansión internacional inundaba tuiteos y artículos de
medios especializados en tecnología.
"Desafortunadamente, es un paso lógico para una
plataforma que desea ser aceptada en todo el planeta. Algunas compañías
se ven obligadas a hacer serias concesiones en su forma de hacer
negocios para satisfacer los caprichos de magnates de negocios, policía
secreta y líderes religiosos. Twitter acaba de hacer una de estas
concesiones", sostenía la revista "TechCrunch".
En esa línea, "Mashable" lanzaba al aire la
siguiente pregunta: "¿Debería Twitter comprometerse con gobiernos
censores por el bien de su expansión global?".
Y, en parte, Twitter les daba la razón en su
comunicado: "A medida que nos expandimos internacionalmente, tendremos
presencia en países que tienen distintas concepciones sobre los
contornos de la libertad de expresión".
Desde el colectivo de "hacktivistas" Anonymous
preguntaban que qué se podía esperar de una compañía en la que han
invertido magnates de Arabia Saudí y pedían a los tuiteros que no
accedan a la red de "microblogging" mañana sábado como forma de protesta
por esta nueva política.
Para algunos usuarios, esta decisión supone una
"traición" por parte de una compañía que ha sido crucial en el éxito de
las revueltas de la primavera árabe y en lograr "que los tiranos se
murieran de miedo" en 2011, como sostenía el tuitero @iyd_elbaghdadi.
Y es que hace tan sólo un año la compañía
californiana aseguraba que su objetivo era conectar a las personas en
torno a aquello que ellos consideren importante, y ahí la libertad de
expresión es "esencial".
Richard Walters, del "Financial Times", intenta
dar con la clave: "Será la voluntad de Twitter de luchar por sus
usuarios, y no ceder cada vez que se tope con resistencia local, lo que
determinará si sigue siendo uno de los medios de comunicación más
abiertos del mundo". EFE
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinion nos ayuda a crecer