Si pudieramos hacer una fotografia de la sociedad en que vivimos‏

Autor Antonio Regalado

Lider espiritual dominicano residente en Estados Unidos

Si pudieramos hacer una fotografia de la sociedad en que vivimos, cual seria nuestra percepción después de captar todo el contenido a través de los sentidos, y qué motivos estariamos en realidad enarbolando para celebrar en esta Navidad.

En medio del desenfreno de las pasiones muchos olvidan el verdadero propósito de la Navidad que es celebrar el nacimiento de Cristo.


"He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel, que traducido es: Dios con nosotros. San Mateo 1:23.

Pensemos detenidamente en la realidad dominicana que tenemos por delante, por ejemplo meditemos en la cantidad de personas muertas en "intercambios de disparos" con la Policía Nacional, en lo que era antes nuestro país y lo que es ahora, el narcotráfico y su secuela negativa, la corrupción administrativa que se mueve desde las altas instancias de poder, los políticos que no le dejan la vida en paz al pueblo con su campaña permanente y sus promesas no cumplidas, el ambiente delincuencial que mantiene en pánico a la gente, la violencia intrafamiliar, la falta de trabajo para ganarse la vida, la industria del secuestro, inseguridad ciudadana, la escasez de dinero, y mucho más cosas encontrariamos en la foto de una muchedumbre común y humilde aparentemente fracasada por la pérdida de la esperanza.

Todo el panorama descrito y aún inconcluso, digo yo, es el que predomina en medio de la celebración.

Entonces frente a este escenario, necesitamos con urgencia un respiro porque nos estamos ahogando con tanta inseguridad, presión e incertidumbre en la Nación Dominicana y en otras latitudes del Mundo..

Pero no podemos darnos por vencidos, recuperemos el tiempo perdido, con fe se puede, y reconstruyamos de nuevo el futuro colectivo, porque tenemos una razón poderosa para festejar: El nacimiento de Cristo, nuestra Esperanza de Gloria y nuestra Paz.

Él trajo al mundo Salvación, luz resplandeciente en medio de oscuridad, y pan de vida, para que el que de ÉL coma no muera. Amén.

Bendiciones,

Nuevas del bien