Benedicto XVI realizará ocho intervenciones
públicas, entre discursos y homilías, durante su visita de tres días a
Milán (norte de Italia) del 1 al 3 de junio para participar en el VII
Encuentro Mundial de las Familias, cuyo programa fue hecho público hoy
por el Vaticano.
El papa partirá del aeropuerto romano de Ciampino a las
16.00 hora local (14.00 GMT) del 1 de junio con destino al aeropuerto
de Milán-Linate, adonde llegará una hora más tarde.
Tras ser recibido por las autoridades italianas,
el Pontífice se trasladará a la plaza del Duomo (la catedral), donde
pronunciará el primer discurso.
A las 19.30 hora local (17.30 GMT) asistirá a un
concierto en el Teatro de La Scala, que dirigirá el maestro
argentino-israelí Daniel Barenboim, y volverá a dirigirse al público.
El 2 de junio oficiará una misa privada a las ocho
de la mañana (06.00 GMT) en la capilla del arzobispado de Milán, donde
se alojará durante su estancia en la capital lombarda.
A las diez de la mañana (08.00 GMT) se reunirá con
religiosos y religiosas en el Duomo y a las 11.15 hora local (09.15
GMT) se trasladará al estadio de fútbol "Giuseppe Meazza-San Siro" para
reunirse con miles de jóvenes que se preparan para la confirmación. Allí
pronunciará un discurso y recitará el rezo del ángelus.
Por la tarde, a las 17.00 hora local (15.00 GMT)
se entrevistará con las autoridades locales en el salón de Trono del
arzobispado milanés y dirigirá un discurso al pueblo milanés.
A las 20.30 hora local (18.30 GMT) se trasladará
al parque de Bresso donde se reunirá con las familias de todo el mundo
que asistirán al evento en una vigilia llamada "fiesta del testimonio".
El domingo, a las diez de la mañana (08.00 GMT)
oficiará una misa que se espera multitudinaria en el aeropuerto de
Bresso, localidad cercana a Milán, con la que clausurará el VII
Encuentro Mundial de las Familias y anunciará cuál será la sede del
próximo.
Antes de regresar a Roma, el papa almorzará con
los cardenales, obispos y algunas familias asistentes al encuentro y
después se reunirá con los miembros de la Fundación Familia 2012 y los
organizadores del evento milanés.
A las 18.30 hora local (16.30 GMT) está previsto que regrese a Roma.
El VII Encuentro Mundial de las Familias
católicas, que comenzará el 30 de mayo próximo, tiene como lema "La
familia, el trabajo y la fiesta", y los organizadores -el Consejo
pontificio para la Familia y la archidiócesis de Milán- esperan un
millón de participantes.
Benedicto XVI animó el pasado 6 de mayo a las familias a participar en el encuentro y anunció su presencia.
"Deseo recordar que en menos de un mes se
celebrará en Milán el VII Encuentro Mundial de las Familias.
También yo,
si Dios quiere, tendré la alegría de participar", afirmó.
El Pontífice no pudo asistir, por motivos de
salud, al Encuentro anterior, celebrado hace tres años en Ciudad de
México, debido a la altitud de la capital mexicana.
Los encuentros mundiales de las familias fueron
creados por Juan Pablo II y, desde 1994, los organiza el Consejo
Pontificio para la Familia.
El primero se celebró ese mismo año en Roma, el
segundo en Río de Janeiro (1997), el tercero de nuevo en Roma (2000,
coincidiendo con el Año Santo), el cuarto en Manila (2003), el quinto en
Valencia (España, 2006) y el sexto en Ciudad de México (2009). EFE
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