Escrito por el profesor Ley Sime |
Cuando
una persona se eleva económicamente, allá arriba, alguien le aconseja,
que ni mire para abajo, ni para atrás, porque si te caes, te encontrarás
contigo mismo y te va a espantar". Muchas personas se han llevado de
ese consejo y sin saberlo, están provocando lo que pasó en Francia en
1789.
Vamos a recordarles esto; Algunas idea de la causa de la revolución Francesa.
La población había crecido. La limitación de la agricultura. El absolutismo produce hambre. Exaspera las masas.
El comercio y las manufacturas se desplomaron por
las limitaciones del sistema. Los gremios, el monopolio otorgado y
ejercido por el poder, crearon situaciones precarias y miserables. El
mundo de los negocios se resentía al no encontrar apoyo.
La política
exterior seguía siendo el estamento del Estado Francés (El Clero, la
Nobleza y la Aristocracia). La brecha social era inmensa entre ricos y
pobres. El Estado tenía su soporte en las cargas tributarias que
irritaba a la burguesía, a favor de las clases privilegiadas exentas de
las contribuciones que agobiaban al pueblo común. Los ilustrados
divulgaron la idea de que Francia podría liberarse de estos males: (
Pobreza, hambruna, corrupción, injusticia y desigualdad). Los préstamos,
a menudo con impuestos, además con intereses en que solo la nobleza
participaba en las tomas de decisiones, marginando al pueblo. Se criticó
el parasitismo de la nobleza. (Los obispos eran los nobles).
Ahora dígame Ud. si esto pudiera narrarse en presente del indicativo, bien podríamos pensar en nuestro país. Cuidado! El que ignora la historia, está propenso a repetirla.
Cuando a un pueblo lo están estrangulando, le puede surgir una fuerza mas devastadora, que las ráfagas de un huracán categoría cinco
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