Trillizas siguen como ejemplo a los 25 años

Se graduaron con honores en 2007 en la Universidad Católica Madre y Maestra, donde en la actualidad realizan especialidades en sus carreras

Escrito por: PILAR MORENO (Pilarmoreno26@hotmail.com)

Bethania Fernández y su hija menor, 

Cintia Echavarría Fernández.

A sus 25 años de edad, las trillizas Laura, Virginia y Marieli Echavarría Fernández siguen como un ejemplo de superación académica, personal y familiar.

Las trillizas causaron asombro al graduarse con honores en una de las más prestigiosas universidades nacionales, en septiembre del 2007.

Inmediatamente, emprendieron con éxito la vida laboral e iniciaron el proceso de formación de sus hogares.

Nacieron en el 1985, como el segundo nacimiento de trillizas conocido en la República Dominicana, del matrimonio de Bethania Fernández y Julio Enrique Echavarría Toro.

Virginia se graduó Magna Cum Laude en Administración de Empresas; Laura, Cum Laude en Derecho  y Marieli, Cum Laude en Ingeniería Industrial, en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PCMM).

Laura desempeña con éxito su profesión en una oficina de abogados, virginia en una compañía de seguros y Marieli, en una  importante institución bancaria, para orgullo de sus padres, hermanos,  maestros y  amigos.

Todos han seguido con atención su dedicación a los estudios,  su desarrollo académico y su vida ejemplar.

Laura, Virginia y Marieli son el mejor ejemplo de su hermana Cintia, quien acaba de terminar el bachillerato en el colegio Calazanz, con las mejores notas. Como sus hermanas, ingresará próximamente a la PCMM, donde cursará la carrera de Comunicación Social.

“Quiero seguir el ejemplo de mis hermanas, graduarme con honores y tener un excelente desempeño profesional”, afirma Cintia, durante una visita a El Nacional, acompañada de su madre.

 Bethania recuerda la ansiedad que significa para una joven madre de apenas 24 años que tendría parto de trillizas, por las implicaciones económicas y las transformaciones personales  que conlleva un hecho de esa naturaleza. Sobre todo, porque para esa época había nacido su primera hija, Carolina, que ahora tiene 28 años de edad, graduada de Ingeniería Industrial.

Sin embargo, afirma que  el nacimiento de Laura, Virginia y Marieli  fue una bendición de Dios, porque la motivó a cursar una carrera universitaria, desarrollarse en la misma, hasta alcanzar el pueblo de gerente en una prestigiosa empresa nacional.

 “Me llené de coraje y determinación cuando el sonografista me dijo que estaba embarazada de trillizos. El me aconsejó que tratara de perfeccionar mis estudios de inglés  y trata de irte a la universidad, porque lo que tú tienes en la barriga no es chiquito”.

  Agregó que “esas palabras me motivaron a hacerme profesional, consciente de que sólo cursando una carrera podía garantizar el sustento económico para  mi familia”.

  Btehania estudio Administración de Empresas y, posteriormente, cursó un post grado en Comercio Exterior.

“Gracias a Dios ellas se desarrollaron muy bien. No se enfermaban, fueron niñas muy sanas y crecieron siempre  apegadas a las buenas costumbres.

Asegura que los buenos ejemplos en el hogar fueron la base del éxitos de sus hijas.

UN APUNTE

Ejemplos

Bethania Fernández, madre de las trillizas Laura, Virginia y Marieli Echavarría asegura que los ejemplos de perseverancia, honradez, humildad y amor familiar permitió a sus hijas ser exitosas como profesionales y como seres humanos.