En
un solo día, la madrileña Yolanda Carramolinos pudo cumplir su sueño de
dar la vuelta por Europa: pudo conocer la Torre Eiffel, el Tower
Bridge, la Fontana de Trevi y la Puerta de Brandemburgo.
Y
es que el Parque Europa, una enorme explanada en las afueras de Madrid,
contiene replicas de los principales monumentos europeos.
"Me
ha encantado sobre todo la Torre, es preciosa. Mi esposo y yo siempre
quisimos viajar a París, pero él murió hace dos años", le comenta
Carramolinosa BBC Mundo, entre alegre y taciturna.
Acaba
de jubilarse como cocinera de un hospital de la ciudad y el sitio más
lejano que había visitado hasta entonces eran las islas Baleares, para
su luna de miel. Quizás por ello se siente un poco más satisfecha, a
pesar de que la Torre mida 30 metros de altura en lugar de los 300 de
la original.
La mayoría de los 16
monumentos que alberga el parque miden la mitad de su original o se
acercan bastante, como la Puerta de Alcalá de Madrid o la Puerta de
Brandemburgo. Justo a un lado de ésta se puede apreciar un trozo
original del Muro de Berlín.
El llamativo
parque, único en Europa por sus dimensiones (más de 230.000 metros
cuadrados), tiene además tres lagos y varias zonas de ocio como
embarcaderos, tiro con arco o una polea para sobrevolar las aguas del
Támesis madrileño.
La entrada es gratuita y en las pocas semanas de abierto al público ya ha recibido a más de medio millón de trotamundos.
De basurero a "pequeña Europa"
El
complejo se sitúa en un antigua zona deprimida, utilizada para arrojar
escombros y basura, del ayuntamiento de Torrejón de Ardoz en el noreste
de la Comunidad de Madrid.
La localidad,
salpicada de polígonos industriales y barrios obreros, de repente
cuenta con una gran mancha verde donde se divisa un paisaje imposible:
la Torre Eiffel con el David de Miguel Ángel a sus pies o la Sirenita
de Copenhague con el Tower Bridge de fondo.
"Torrejón
siempre ha tenido una gran carencia de parques y esta zona era una de
las más degradadas. Desde hace más de 40 años era una gran escombrera
ocupada por bodegas abandonadas e infraviviendas", explicaba el alcalde
de la localidad, Pedro Rollán, durante la inauguración.
El
costo no supera los US$9 millones, según el gobierno local, pero la
oposición afirma que ha costado el doble y que el "parque supondrá un
gasto innecesario en plena crisis económica".
"Quiero viajar pero no puedo"
Para la madrileña Elena Ignacio, de 20 años, el parque ha aumentado sus ganas de viajar pero no puede.
"No
encuentro trabajo y mis padres cada vez me dejan menos dinero. A veces
me siento como en una cárcel. Si por mi fuera tomaría una mochila y me
iría por ahí durante un año", le comenta a BBC.
Torrejón siempre ha tenido una gran carencia de parques y esta zona era una de las más degradadas. Desde hace más de 40 años era una gran escombrera ocupada por bodegas abandonadas e infraviviendas
Pedro Rollán, Alcalde de Torrejón
Su situación es la misma de sus amigos: el colectivo juvenil en España es uno de los más golpeados por el desempleo.
"He
ido un par de veces al parque con mis amigos. La Fontana de Trevi está
genial, la gente ha empezado a tirarle monedas. La que está calcada es
la Puerta de Brandemburgo. Me tomé varias fotos y las colgué en mi
Facebook. La mayoría de mis contactos se creyeron que estaba
recorriendo Alemania", sonríe. "Espero ir algún día", agrega con
escepticismo.
Yolanda no sólo se lo creyó,
se lo contó a sus hijos. "Si fuera más joven viajaría. Primero iría a
lo que tengo más cerca y luego más y más lejos. Siempre le digo a mis
hijos que viajen, que cuanto más se conoce, mejor", comenta.
Como cuando descubrió al Manneken Pis
belga, el niño desnudo que aparece orinando en una fuente de Bruselas.
"No sabía que existía. Me explicaron que lo suelen disfrazar. Ya que lo
tenemos aquí habría que ponerle un traje de bailaor", sugiere la mujer.
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