Aires, (EFE).- La diseñadora venezolana Carolina Herrera acaba de inaugurar en Buenos Aires el primer local de su exclusiva marca de alta costura, que, según dijo, está destinada a quien "quiere verse como verdadera mujer, no estar disfrazada".
En entrevistas que publican hoy los diarios argentinos La Nación y Perfil, también consideró que "la igualdad entre el hombre y la mujer es que si haces el mismo trabajo tienes que estar remunerada en la misma cantidad; eso es todo".
La apertura de la tienda de Carolina Herrera en Patio Bullrich, uno de los centros de compras más exclusivos de la capital argentina, reunió el pasado jueves a figuras del espectáculo local como la actriz Inés Estévez.
"Yo creo que las mujeres que usan Carolina Herrera son unas mujeres modernas, activas, independientes, pero al mismo tiempo quieren ser sofisticadas, elegantes", describió la diseñadora.
La venezolana radicada en Estados Unidos añadió que el estilo que propone "es para una mujer que quiere verse bien, que quiere verse como verdadera mujer, no estar disfrazada" y que "es divertida, no quiere verse divertida".
A Herrera le parece "sencillamente horrorosa la moda que sale" en la popular serie televisiva "Sex and the City", que, a su juicio, "no debería existir porque es la antimoda".
Tras preguntarse "qué es lo que está pasando, que las mujeres no quieren usar los apellidos de sus maridos", evaluó que negarse a hacerlo "no es ser independiente, es una moda" y se mostró orgullosa de utilizar el de su esposo, Reinaldo Herrera.
"Las mujeres para llegar a algo, así sea a presidenta de la república, de un banco, de lo que les dé la gana, no deben olvidarse de ser mujeres, de ser femeninas. Llegas mucho más lejos que estar compitiendo directamente con un hombre, vestida como un hombre también", manifestó.
La diseñadora dijo que no está "de acuerdo con la rivalidad con los hombres" por considerar que "los matrimonios no funcionan cuando empieza una rivalidad", lo que "no debería existir, porque la vida se hace imposible".
Al ser consultada sobre si la crisis internacional afecta a la moda, respondió que las tiendas que posee en diferentes lugares del mundo "van bien" y que ante las dificultades "uno tiene que seguir adelante".
"Es tan extraño todo lo que pasa en la moda que yo creo que es la última que se va en la crisis, porque las mujeres no dejan de comprar nunca y los hombres también, de vez en cuando. Y después de las crisis, la moda resurge", enfatizó.
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