Miguel Vargas acepta el triunfo de Hipólito Mejía

Miguel Vargas Maldonado reconoció ayer como candidato presidencial a Hipólito Mejía porque “el Partido Revolucionario Dominicano atraviesa por una situación muy delicada, y es tiempo de poner punto final a la crisis, de procurar el entendimiento y la unificación interna”.

Vargas Maldonado sostuvo que tomó la decisión luego de reflexionar profundamente junto a sus amigos, allegados, colaboradores y familiares por lo que “quiero, una vez más, actuar con responsabilidad, prudencia y sensatez”.

“Al presentar nuestra aspiración presidencial para el 2012, abrí mi corazón a todos los perredeístas sin distinción de simpatías. Hoy, al declinarla a favor de la unidad, ofrezco mi experiencia, mis ideas, mis fuerzas y mis energías, como presidente del PRD y como militante, para que el partido alcance el poder”, expresó.

Igualmente, dijo que no ha habido ningún acuerdo posterior al 6 de marzo y que se acoge únicamente a lo establecido en el “Pacto de Compañeros” en el que se comprometieron con la aplicación de la proporcionalidad y dijo a los dirigentes de su proyecto que él garantizará su cumplimiento.

Llamó a sus seguidores a colaborar sin rencores y desprendimiento para “que nuestro partido y el compañero Hipólito Mejía alcancen el poder en las próximas elecciones”. Sostuvo que ha mantenido su posición con altura y prudencia y que ha demostrado que “ha tenido lugar una confabulación de fuerzas internas y externas para despojarme de mis derechos, pretendiéndose desmeritar mis reclamos”.

Vargas Maldonado aseguró que los resultados que ofreció la Comisión Organizadora de la Convención no se corresponden con la voluntad de la colectividad de los perredeístas y acusó a la mayoría de sus integrantes de parcializarse y actuar con intolerancia y beligerancia luego de la convención del 6 de marzo pasado.

“Nuestro cuestionamiento a esos resultados viciados no se debe a insensatez o a falta de espíritu democrático. No!, se debe a que no son la fiel expresión mayoritaria de los votos de la familia perredeísta y ciudadanos independientes, sino de la influencia de otras fuerzas políticas interesadas en imponer el candidato del PRD”, dijo.

Respecto a las negociaciones que mantenía con Mejía, dijo que “no pido nada a cambio para mí, no he solicitado ni aspiro a la candidatura vicepresidencial ni a un cargo en un posible gobierno del PRD, no reclamo la extensión de mi mandato como presidente del partido, ni la nominación previa de la candidatura presidencial para el 2016”.

Abre camino para la proclamación

Vargas Maldonado hizo pública su posición en un discurso que pronunció ante los medios de comunicación, su equipo de campaña y decenas de sus seguidores, en el hotel Dominican Fiesta, en la capital.

Ante sus emotivas palabras, a muchos de sus simpatizantes les rodaron lágrimas por las mejillas. En medio de los aplausos de los presentes, a Vargas se le extravió una de las hojas de su discurso, lo que rompió, por un momento, el orden del acto.

El PRD realizó sus primarias internas el pasado 6 de marzo y desde entonces estuvo sumido en una crisis debido a que Vargas se negaba a reconocer los resultados de la convención.

Desde entonces se habían hecho varios anuncios sobre supuestos acuerdos entre los grupos de los aspirantes. La decisión de Vargas Maldonado abre el camino para la proclamación oficial de Mejía a través de una Asamblea de Delegados.

Resalta acuerdo

Vargas Maldonado dijo que el viernes pasado quedó evidenciado uno de los beneficios del acuerdo que firmó con el presidente Leonel Fernández sobre la no reelección presidencial consecutiva, cuando el gobernante anunció que declinaba repostularse.

Señaló que los que criticaron el acuerdo porque no lo entendieron o no creyendo en el, hoy tienen que reconocerlo. “Con el pecho erguido, le digo a nuestro líder y amigo, José Francisco Peña Gómez: Puedes estar tranquilo, la reelección presidencial consecutiva en la República Dominicana, por la que tú tanto luchaste, es cosa del pasado. Es el homenaje de este humilde discípulo a mi insustituible maestro”.