Tras 17 días de angustia, llegó la buena noticia de que los mineros están vivos, incluido el papá de los hermanos Reygadas.
Omar Reygadas es uno de "los 33": a sus 56 años, quedó atrapado junto a un grupo de compañeros en el derrumbe de la mina San José, en el norte de Chile, el pasado 5 de agosto.
Desde entonces, cuatro de sus hijos - Ximena, Marcela, Omar y Luciano- han permanecido en las afueras de este yacimiento de oro y cobre, ubicado cerca de Copiapó, a unos 800 kilómetros al norte de Santiago. Conózcalos en este video de BBC Mundo.
Tras 17 días de angustia, llegó la buena noticia de que los mineros están vivos, incluido el papá de los hermanos Reygadas.
"Mi padre se ha criado en una familia de mineros, de pequeño trabajó ayudando a los tíos o a su papá en minería, y acá es el encargado de sacar el metal y cargar los camiones. Es el operador de la maquinaria pesada", cuenta Omar.
Los cuatro hermanos pasaron aquí 17 días de búsqueda y angustia, hasta que recibieron la buena nueva: los hombres habían sobrevivido. Hoy se guarecen en un refugio subterráneo, a la espera de que una gigantesca operación de rescate los traiga de nuevo a la luz.
Los Reygadas, en tanto, duermen en tiendas en el Campamento Esperanza, que han improvisado las familias a la entrada del cerro para pasar la espera.
"Nos vinimos de inmediato y dejamos todo botado, nos vinimos nomás. Claro que nuestros jefes nos dijeron que no nos preocupáramos, cero problema. Y no nos movemos de aquí, hemos bajado a hacer trámites (a Copiapó), pero siempre queda alguien", comenta.
Desde allí, los integrantes de la familia Reygadas nos estarán contando sus experiencias en el Campamento Esperanza mientras avanzan las labores de rescate. Acompáñelos en su espera en BBC Mundo.
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