Los presidentes de Rusia, Vladímir Putin, y de
Siria, Bachar al Asad, conversaron hoy por teléfono sobre la marcha del
desarme químico en el país árabe, informó el Kremlin.
Ambos mandatarios "abordaron la marcha del
cumplimiento de los trabajos para poner bajo control internacional y
destruir las armas químicas en Siria", señaló la presidencia rusa en un
comunicado.
El jefe del Kremlin "expresó su satisfacción por
la cooperación entablada entre las autoridades sirias y la misión de la
Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ) y la ONU".
El pasado 31 de octubre, la OPAQ dio por concluida
una primera etapa para la destrucción de las armas químicas en Siria,
en concreto, el desmantelamiento de las plantas de producción y
equipamiento.
La OPAQ espera ahora que Siria concrete un plan
para la completa eliminación de todo el arsenal químico del país,
proceso que debe consumarse durante la primera mitad de 2014, en virtud
del acuerdo ruso-estadounidense para evitar una intervención militar
extranjera en el país árabe.
Por otra parte, según la nota oficial, "Putin
destacó los esfuerzos conjuntos realizados por Rusia y sus socios para
preparar la conferencia internacional Ginebra 2.
"Y valoró positivamente la disposición de Asad de
enviar a ese evento una delegación gubernamental", añadió el comunicado
del Kremlin.
Durante la conversación entre ambos presidentes
"se expresó la esperanza de que los principales grupos opositores asuman
una postura constructiva y tomen parte en la conferencia".
Con respecto a la situación humanitaria en el país
árabe, Putin expresó su inquietud por las informaciones sobre la
persecución de los cristianos y otras minorías religiosas a manos de los
extremistas.
"Se expresó la confianza de que el Gobierno de
Siria hará todo lo posible para aliviar el sufrimiento de la población
civil y reinstaurar la concordia entre las diferentes confesiones",
recoge la nota de la presidencia rusa.
Asad expresó su agradecimiento a las autoridades rusas por su ayuda y apoyo al pueblo sirio.
Rusia y EEUU manifestaron esta semana su
satisfacción por la decisión de la opositora Coalición Nacional Siria
(CNFROS) de participar en la conferencia Ginebra 2, aunque Moscú instó a
no imponer condiciones previas.
La Cancillería rusa recordó esta semana que ni
Damasco ni otras organizaciones opositoras como el Consejo de
Coordinación Nacional ni el Consejo Supremo de los Kurdos de Siria han
planteado condiciones para acudir a dicha conferencia.
Recientemente, Rusia se ofreció a acoger
negociaciones entre el Gobierno sirio y grupos de oposición para acordar
los términos de la reunión de Ginebra.
Según el mediador internacional para Siria, Lajdar
Brahimi, la citada conferencia no tendrá lugar en noviembre, pero
aseguró que la comunidad internacional hace todo lo posible para que sea
convocada antes de finales de este año.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinion nos ayuda a crecer