NUEVA YORK._ Bajo la dirección del cardiólogo
cirujano doctor Reed Quinn, el Centro Médico de Maine (Portland),
comenzó este año el programa “Gift of Life” (Regalo de Vida) que busca
salvar las vidas de cientos de niños en el mundo, especialmente aquellos
que sufren de problemas en el corazón.
El programa, auspiciado por el
Club Rotario Internacional, se inauguró con sendas operaciones a las
niñas dominicanas Genesis Lluberes de dos años de edad y a quien los
médicos en la República Dominicana, le habían vaticinado la muerte en
cuatro años más y Daisy Mayí de 21 meses, quienes fueron operadas de
corazón abierto por el doctor Reed y el equipo que lo acompañó en la
intervención.
El programa Regalo de Vida existe desde 1974,
salvándoles las vidas a más de 10.000 niños de diferentes países pobres
del mundo, pero esta es la primera vez que se realiza en el Portland.
Génesis, llegó al hospital padeciendo de
Tetralogía de Fallot, una combinación de cuatro afecciones cardíacas que
le impedía obtener suficiente oxígeno y tanto ella como Daisy también
tenían obstrucciones significativas en las arterias.
Ninguna de las dos
menores hubiera podido vivir más de tres o cuatro años sin la cirugía a
que fueron sometidas.
Paul Emery, dirigente del Club Rotario
Internacional en Gorham Westbrook, se mostró satisfecho por los
resultados de la operación a las niñas y dijo que después que salieron
del hospital, es que comenzarán a tener una infancia normal.
El activista recordó que se inspiró en las
palabras del primer paciente beneficiado con el programa Regalo de Vida,
quien pronunció un discurso de gracias en una convención rotaria para
llevar la causa a Maine.
El doctor Quinn, un reconocido pediatra en el
estado y que frecuentemente opera gratuitamente a niños necesitados,
decidió tomar los casos de las niñas dominicanas sin costo alguno.
Los gastos del viaje de las niñas y sus madres
Esmeralda Vázquez y Dolores Mayí, fueron costeados por el programa y se
hospedaron en una casa Ronald McDonald propiedad la Fundación
McDonald´s. Los gastos médicos fueron asumidos por el Centro Médico de
Portland y por la Fundación Quinn para Cirugía Cardíaca que ayuda a
numerosos niños cada año.
El doctor Quinn también opera unos 20 niños en
China anualmente. En promedio, una cirugía para resolver el problema de
Tetralogía de Fallot y la estadía de una semana en el referido hospital
se calcula en unos $60.000 dólares, sin incluir los anestesiólogos,
según el portavoz del hospital Juan Cordero.
El galeno dijo que una docena de médicos,
incluidos pediatras y cardiólogos forman parte del programa Regalo de
Vida y se involucran en cada una de las cirugías patrocinadas por la
fundación.
Génesis y Daisy no son diferentes”, agregó el
doctor Quinn. Relató que nunca se ha encontrado con un médico en el
Centro Médico de Maine que se haya negado a ayudar a los niños pobres.
“Con esta obra, todos nos sentimos demasiado bien”, terminó diciendo.
Autor: Miguel Cruz Tejada
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