La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, elevó a 708 el número de muertos por el devastador terremoto de 8,8 grados en la escala Richter que sacudió el país en la madrugada del sábado, casi el doble de los que la Oficina Nacional de Emergencia chilena (Onemi) había reportado unas horas antes.
Según este organismo, Maule es la región con mayor número de fallecidos (541), mientras en Bío Bío se registraron 64 muertos. Al menos 36 personas murieron en la Región Metropolitana y 46 en O'Higgins.
El Onemi también informó que en Valparaíso la cifra de muertos es de 16, y en La Araucanía, de 5.
"La catástrofe es enorme… y hay un numero todavía creciente de personas desaparecidas. Pero tengo la certeza de que estos números van a seguir creciendo", reconoció Bachelet.
clic Lea el informe de la enviada especial de BBC Mundo a Chile
Bachelet, quien informó previamente que el número de damnificados llegaría a los dos millones, anunció que comenzarán de inmediato las tareas de distribución gratuita de alimentos de primera necesidad en las zonas más desvastadas por el terremoto.
Bachelet anunció que comenzarán de inmediato las tareas de distribución gratuita de alimentos.
Tras una extensa reunión con el Comité de Emergencia, Bachelet entregó los detalles del plan de acción determinado en conjunto con sus ministros, otros funcionarios y algunos empresarios.
En particular, las regiones sureñas de Bío Bío y Maule, donde los efectos de los temblores y sus réplicas se hicieron sentir con mayor fuerza, recibirán insumos básicos en los supermercados.
El gobierno decretó zona de catástrofe ambas regiones e impuso un toque de queda.
Además, las Fuerzas Armadas empezaron a desplegarse en Concepción, después de que, durante el domingo, se repitieran escenas de saqueos en comercios de esta ciudad, la segunda más grande de Chile y capital de la octava región, y en otros puntos del país.
clic Lea: Terremoto en Chile: rescates y saqueos en Concepción
"Estamos en una emergencia sin parangón en la historia de Chile. Hemos firmado con el ministro del Interior y de Defensa el decreto de excepción nacional de catástrofe para las regiones del Maule y Bío Bío", agregó Bachelet.
Esta decisión implica que las autoridades podrán restringir ciertos derechos constitucionales, como los de circulación o transporte de mercancías, a causa de la catástrofe y para prevenir incidentes o mayores daños.
Salud en jaque
En imágenes
Vea imágenes enviadas por los lectores de BBC Mundo
Entre los efectos del terremoto, las demandas de salud son las más acuciantes, según concluyó el comité presidido por Bachelet.
Para hacer frente a las emergencias, la mandataria comunicó que se usará toda la red pública de salud para dar una respuesta a pacientes en situación crítica, mientras continúan los traslados desde hospitales destruidos o cerrados en las zonas más afectadas hacia otros centros de asistencia que quedaron operativos.
"Vamos a buscar distintas soluciones, como hospitales de campaña, pero también acondicionaremos locales que permitan ir implementado soluciones de mediano plazo", detalló la jefa de Estado.
Según anticipó, se enviarán también unos 400 urbanistas a las calles para evaluar la situación de los edificios, entre los cuales habría muchos que no presentan problemas visibles pero podrían tener graves fallas estructurales.
La ayuda llegaría, además, del exterior: se está evaluando, según trascendió tras la reunión, el arribo de rescatistas internacionales para apoyar en las tareas.
Restituir servicios
Bachelet informó que el número de damnificados llegaría a los dos millones.
En términos de infraestructura, los funcionarios del Ejecutivo decidieron establecer soluciones de emergencia, como el armado de puentes removibles allí donde los permanentes colapsaron o la apertura de caminos alternativos a las rutas de pavimento quebrado.
"El problema que tenemos ahora se llama energía: restablecimiento pronto de la energía", sintetizó el ministro del Interior, Edmundo Pérez Yoma.
Los esfuerzos se orientan, además, a restablecer las comunicaciones interrumpidas en distintos puntos del país, con un sistema telefónico colapsado o, cuanto menos, de funcionamiento intermitente.
clic Lea: Un millón y medio de viviendas dañadas
No hay ninguna justificación para los saqueos que se produjeron hace un rato en la ciudad de Santiago. Puede ser entendible en Concepción, pero incluso allí llevamos 24 horas y resulta difícil pensar que en 24 horas se hayan generado situaciones de necesidad tales como para justificar estos actos
Edmundo Pérez Yoma, ministro del Interior chileno
En este sentido, las autoridades dieron una buena noticia: la restitución de vuelos en el aeropuerto de Santiago, cuyas operaciones habían quedado interrumpidas tras el terremoto. Los servicios, por el momento, se restablecieron para aviones que llegan a la capital chilena, aunque no así para vuelos salientes.
Entre tanta medida en marcha, los funcionarios hicieron un llamado a la población para controlar aquello que queda por fuera de sus decisiones: la conducta ciudadana.
El ministro Pérez Yoma llamó a "actuar en forma responsable" y evitar acciones de desorden u saqueos.
"No hay ninguna justificación para los saqueos que se produjeron hace un rato en la ciudad de Santiago. Puede ser entendible en Concepción, pero incluso allí llevamos 24 horas y resulta difícil pensar que en 24 horas se hayan generado situaciones de necesidad tales como para justificar estos actos”, declaró el responsable de la cartera del Interior.
¿Se encuentra en Chile? Envíenos su testimonio en foto o video clic haciendo clic aquí, o si prefiere escríbanos usando el formulario a continuación.
Autora Valeria Perasso
Enviada especial de BBC Mundo a Chile
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinion nos ayuda a crecer