Treinta y siete personas han muerto en hechos
relacionados con las protestas antigubernamentales iniciadas en
Venezuela el 12 de febrero, según datos actualizados brindados hoy por
la fiscal general del país, Luisa Ortega.
"Hasta el día de hoy tenemos 37 fallecidos, 29
civiles y ocho funcionarios policiales militares, incluido un fiscal del
ministerio público", informó Ortega en una rueda de prensa sin dar más
detalles.
La información de Ortega incluye dos nuevas muertes respecto al reporte anterior.
Los lesionados ya suman 559, de los cuales 379 son
civiles y 180 son funcionarios policiales, mientras que los detenidos
ascienden a 168.
La fiscal reveló que su despacho abrió 81
investigaciones por presuntas violaciones de los derechos humanos, de
las cuales 75 son por trato cruel, dos por tortura, dos por homicidio
consumado y dos más por homicidio frustrado.
Indicó que estas investigaciones han arrojado
hasta el momento la detención de 17 funcionarios de los diferentes
cuerpos de seguridad del Estado y que tres más se encuentran con medidas
cautelares sustitutivas a la presión preventiva.
Además, señaló que se han girado siete órdenes de captura que todavía no se han hecho efectivas.
"Lo que ha ocurrido son acciones de
individualidades (...) vamos a castigar, a sancionar a quienes aparezcan
como responsables de tales eventos", afirmó sobre las investigaciones a
los miembros de las fuerzas de seguridad venezolanas.
Ortega afirmó que en "tres o cuatro" semanas
esperan haber concluido con las investigaciones que tienen en curso
relacionadas con las protestas violentas.
Venezuela se encuentra sumida en una oleada de
manifestaciones contra el Gobierno desde hace mes y medio, que en
algunos casos han derivado en hechos de violencia.
El Ejecutivo llamó a un diálogo de paz para tratar
de buscar una salida y pidió a la Unión de Naciones Suramericanas
(Unasur) que enviara una misión al país para que contribuyera a la
solución de la actual crisis política.
Tras reunirse esta semana con representantes del
Gobierno, de la oposición, los estudiantes, los empresarios, entre otros
sectores, la comisión de cancilleres de Unasur emitió una serie de
recomendaciones, entre ellas deponer todas las acciones violentas, así
como respetar los derechos humanos y el orden democrático.
Además, acordó con el Gobierno la necesidad de
tener "un testigo de buena fe que facilite el diálogo entre todas las
partes", una solicitud que fue hecha por la oposición el martes pasado.
Maduro dijo el jueves por la noche que está de
acuerdo en que dicho testigo sea el secretario de Estado del Vaticano y
exnuncio de Venezuela, Pietro Parolín, pero opinó que la oposición en
realidad no quiere diálogo. EFE
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinion nos ayuda a crecer