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| Escrito por el Pastor Antonio Regalado |
Ayer era el dia de acción de gracias. Thanksgiving o dar gracias es una
celebración que tradicionalmente se celebra en Los Estados Unidos de
Norteamérica en el cuarto jueves del mes de noviembre.
Los festejos se llevaron a cabo en medio de una crisis globalizada
que refleja una actitud de protesta de la gran mayoría en la nación
dominicana, reclamando demandas sociales para paliar por lo menos
grandes carencias en los servicios básicos familiares.
Los indignados dominicanos están en las calles del país, exigiendo
mejores condiciones de vida, en contra de la reforma tributaria,
exigiendo justicia para los culpables del hoyo financiero, y con el
objetivo ampliar las protestas a más comunidades del país para difundir
la muestra de disconformidad y oposición por la desigualdad
económica y social existente en la sociedad dominicana.
América Latina se encuentra sumergida en un cúmulo de dificultades
donde destaca el gran auge del crimen organizado, el narcotráfico, el
aumento de feminicidios en Estados Unidos y Europa, la falta de
educación de excelencia para enfrentar los enormes desafíos de cara al
futuro,el alto crecimiento de la inseguridad ciudadana, desempleo, alto
costo de la vida, la corrupción promovida desde las instancias de poder,
en fin, el asunto pica y se extiende, y no se ve una solución
inmediata, y a todo eso hay que agregar la deuda financiera acumulada
por largos años con el fondo monetario internacional y que parece no
tener fin.
En ese contexto recibe la comunidad dominicana residente en
Estados Unidos donde se dispone a celebrar en familia este dia de acción
de gracias.
Esta conmemoración se remonta a noviembre de 1620 cuando el barco
Mayflower {Flor de Mayo} transportó a los llamados peregrinos desde
Inglaterra hasta los Estados Unidos, siendo los primeros colonos
establecidos en la costa de Massachusetts, formando de esa manera la
primera colonia en Plymouth.
Un invierno muy fuerte tomó de sorpresa a 102 personas sin contar a
la tripulación, y no teniendo el tiempo suficiente para prepararse,se
dice que solamente la mitad pudo sobrevivir debido a la ayuda recibida
en alimentos de los nativos que habitaban la zona, los indígenas
wampanoag.
Se cuenta que al año siguiente aquellos sobrevivientes establecidos
produjeron su primera cosecha con la ayuda de los aborígenes que
encontraron y procedieron a compartir el superávit producto de la siega.
Ante estos acontecimientos el gobernador de la colonia proclamó ”
Un día de dar gracias al Señor para que podamos de una manera más
especial regocijarnos después de haber recojido el fruto de nuestro
trabajo.”
Basado en esta historia Estados Unidos y en muchas partes del mundo
proceden a celebrar un día como hoy con una gran cena familiar, donde
el pavo es el atractivo alimenticio principal.
A propósito, se estima que un promedio de 45 millones de pavos fueron consumidos en los Estados Unidos.
Que la paz de Jesucristo reine en cada hogar, y que la celebración
transcurra habitando las familias juntas en armonía. En el nombre de
Jesús. Amén.
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