Westwood Londres, (EFE).- La aparición en el filme "Sexo en Nueva York" de la actriz Sarah Jessica Parker con un traje de novia de seda color champán diseñado por la británica Vivianne Westwood ha dado un gran empujón a las ventas de la famosa modista.
La facturación de la marca Vivienne Westwood creció casi un 20 por ciento el año pasado hasta 17,6 millones de libras (19,4 millones de euros) después de que el personaje interpretado por Jessica Parker, Carrie Bradshaw, apareciese con ese vestido.
"El hecho de figurar en 'Sexo en Nueva York' nos ayudó mucho. Nos aportó nuevos clientes y dio a conocer nuestra marca en todo el mundo. Somos una compañía independiente y eso fue valiosísimo", reconoció Carlo D'Amario, socio de la modista, según informa el vespertino "Evening Standard".
Según D'Amario, las ventas se vieron también favorecidas por la "creatividad" de los diseños de Westwood y su carácter relativamente asequible.
En la película, Carrie Bradwhaw lleva el vestido de seda de Westwood cuando su novio, Mr. Big, la deja plantada ante el altar.
Un portal de moda llamado Net-a-Porter introdujo una versión del mismo vestido que llegaba sólo hasta las rodillas y que se vendió en cuestión de horas pese a tener un precio de 4.900 euros (7.200 dólares).
También ayudó a Westwood el hecho de que la actriz Kim Cattral, de la misma película, llevase ropa de la diseñadora británica en los estrenos del filme en Nueva York y Londres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinion nos ayuda a crecer