Ochocientas mujeres, 150 niños y adolescentes y cinco
hombres familiares de presos permanecen "autosecuestrados" en una
prisión de Venezuela para protestar, contra el retardo procesal
principalmente, en una práctica no del todo inusual en un país con un
sistema carcelario en crisis.
Son casi 1.000 familiares que ingresaron el
viernes a la cárcel de Yare I y II, en las afueras de Caracas, para
pasar el fin de año y en lugar de retirarse el lunes decidieron
quedarse.
La información fue confirmada el
martes por la ministra para el Servicio Penitenciario, Iris Varela,
quien dijo que se trataba de "una situación de autosecuestro. Es una
situación voluntaria. ¿Qué tiene que hacer el Ministerio?: hablar con
ellos".
Carlos Nieto Palma, director de la ONG Una
Ventana a la Libertad, una organización que promueve la defensa de los
derechos humanos de los privados de libertad, le dice a BBC Mundo que
considera "inadecuado el término 'autosecuestro'. Por lo que he
conversado con presos y familiares de presos que están dentro y afuera
hubo un acuerdo para quedarse (...) Hasta que la ministra no vaya, no
van a parar".
"Puede haber algún grupo pequeño que esté contra su voluntad pero se callan la boca por motivos de solidaridad", agrega.
Nieto Palma fue contactado el lunes por presos y familiares para informarle de la situación.
¿De qué se quejan?
"(Es) una situación de autosecuestro. Es una situación voluntaria. ¿Qué tiene que hacer el Ministerio?: hablar con ellos"
Iris Varela, ministra para el Servicio Penitenciario
Seis de cada diez presos en cárceles venezolanas
ni siquiera han tenido una audiencia preliminar y es este retardo
procesal el principal motivo de queja entre los reclusos.
También están protestando por el ofrecimiento,
no concretado, de otorgar medidas sustitutivas a la privación de
libertad, las malas condiciones de vida dentro de los centros
penitenciarios y por maltratos de la Guardia Nacional.
La situación del "autosecuestro" "no es algo
nuevo", dice Nieto Palma, "pero tampoco es que se dé todos los días,
ocurre con relativa frecuencia". El primer caso que recuerda se dio hace
10 años.
"Por lo general -le dice a BBC Mundo Luis
Cedeño, de la ONG Paz Activa- en estos 'autosecuestros' se llega a una
etapa de tensión máxima porque no hay comida y no están dadas las
condiciones para albergar a las personas y los terminan 'liberando', y
algunas veces se ha resuelto con el traslado de un grupo pequeño de
presos a tribunales".
En Yare se originó luego de que los familiares
no se retiraran tras la llamada "pernocta", un mecanismo que se viene
aplicando desde 2008 por el cual las esposas e hijos de los presos pasan
una noche o el fin de semana en los centros de reclusión.
La ministra aseguró que se trata de "un derecho
adquirido que se va a ir eliminando poco a poco (…) Tenemos un plan
nuevo que se ha presentado al país para hacer las cosas distintas, pero
abordando de otra manera".
Nieto Palma denuncia el "descontrol" en el
sistema de visitas, por la falta de espacios especiales para ello, y
asegura que el sistema de la pernocta "fue una orden que en su momento
la dio el ministro del Interior, Tareck El Aissami, como una forma de
que los familiares cubran las carencias del Estado porque van el fin de
semana y mejora la higiene, llevan ropa, comida".
"Puede haber algún grupo pequeño que esté contra su voluntad pero se callan la boca por motivos de solidaridad"
Carlos Nieto Palma, director Una Ventana a la Libertad
Las propias autoridades han reconocido que "se
efectuaron denuncias de situaciones ocurridas durante las pernoctas que
ponen en riesgo la integridad de los familiares", según ha dicho la
Defensoría del Pueblo.
La prensa ha reportado de un caso en el que un
hombre mató a su mujer en una de estas pernoctas y luego fue asesinado
por otros reclusos.
Sin embargo, la Defensoría ha dicho que se trata
de una de las "medidas que ha implementado el Ministerio del Interior
para humanizar el entorno penitenciario y contribuir con la disminución
de los niveles de violencia".
Un Ministerio para la crisis
Varela asumió el cargo a mediados de año en un Ministerio creado tras un
motín en la cárcel de El Rodeo, cuando durante 27 días un millar de presos resistieron con armas un intento de las autoridades por controlar el recinto.
Ese hecho puso en evidencia una vez más la
crisis en el sistema carcelario del país, donde unas 50.000 presos se
hacinan en 34 centros penitenciaros con capacidad para 18.500 personas.
"Por la CIA"
La ministra para el Servicio
Penitenciario, Iris Varela, aseguró que las organizaciones no
gubernamentales que cuestionan la realidad del sistema carcelario en el
país están "financiadas por la CIA" y que nunca han ingresado a una
prisión venezolana.
Una de las primeras medidas anunciadas por Varela fue un
plan para descongestionar las cárceles que incluía la liberación del 40% de los presos, algo que aún no se ha concretado.
Las cárceles venezolanas, con casi 500 muertos este año, son consideradas las más violentas de la región y su control, muchas veces, no está en manos de las autoridades sino bajo clic
mafias carcelarias y redes de corrupción.
"El ejemplo más claro de esta situación
-denuncia la ONG Provea- es la suspensión de las requisas y el pase
diario de lista y número en distintos establecimientos penitenciarios,
y el porte de armas por parte de la población encarcelada, calificado
por el director de un establecimiento penitenciario como 'cuestiones
incontrolables que sólo las domina la población penal'".
Esta semana cinco presos acusados de violación
contra menores fueron asesinados en sus celdas en una cárcel del estado
Táchira y los
secuestros de funcionarios carcelarios se dan con cierta frecuencia.
El propio ministro del Interior, Tareck El
Aissami, ha reconocido la existencia de "una suerte de gobierno que no
le permite ejercer al resto de la población privada de libertad sus
derechos".
La situación tampoco es nueva: en 2004 el
gobierno decretó una "emergencia penitenciaria" y dos años más tarde
lanzó un Plan de Humanización Penitenciaria 2006-2011 que, entre otras
cosas, establecía la construcción de 25 cárceles.
En ese período el gobierno construyó dos, denuncian las organizaciones no gubernamentales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Tu opinion nos ayuda a crecer